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Perpetuar la prohibición del aborto en Honduras viola los derechos humanos de las mujeres

Perpetuar la prohibición del aborto en Honduras viola los derechos humanos de las mujeres

- El diputado Mario Alonso Pérez presentó una iniciativa para prohibir cualquier forma de interrupción “de la vida del que está por nacer”.

- La prohibición absoluta del aborto priva a la mujer del acceso a procedimientos que, en la mayoría de los casos, podrían salvarle la vida.


Ciudad de México, 13 de enero de 2021.
Honduras es uno de los tres países de Centroamérica que penalizan totalmente el aborto en cualquier circunstancia, incluidos los casos de abortos espontáneos o cuando la mujer sufre un aborto accidental, violación e incesto y de peligro para la vida de la mujer.

Honduras es un Estado firmante de diversos instrumentos internacionales en materia de derechos humanos, acto que lo obliga a la promoción, respeto, protección y garantía de estos derechos. Incluso, el Estado ha recibido diversas recomendaciones de organismos internacionales que lo exhortan a tomar las medidas necesarias para garantizar los derechos sexuales y reproductivos de las niñas, adolescentes y mujeres hondureñas, incluyendo la legalización del aborto, por lo menos en casos de violencia sexual y cuando la salud y vida de las mujeres están riesgo.

No obstante, el diputado Mario Alonso Pérez, presidente de la Comisión de Presupuesto del Congreso Nacional, presentó una iniciativa para reformar el Artículo 67 de la Constitución de la República, para establecer que “al que está por nacer se le considerara nacido para todo lo que le favorezca dentro de los límites establecidos por la Ley” y agregar que “se considera prohibida e ilegal la práctica de cualquier forma de interrupción de la vida del que está por nacer, a quien debe respetársele la vida en todo momento. Serán nulas e inválidas las disposiciones legales que establezcan lo contrario”.

Esta propuesta viola los derechos de las mujeres, los cuales son universales, indivisibles, no pueden distribuirse entre las personas o aplicarse unas veces sí y otras no. Los órganos internacionales de derechos humanos han calificado a las leyes que penalizan el aborto como discriminatorias y como un obstáculo para que las mujeres tengan acceso a atención médica.

Actualmente, el Código Penal hondureño establece que el aborto es la muerte de un ser humano en cualquier momento del embarazo o durante el parto y se imponen penas de tres a seis años de prisión para la mujer que consienta la interrupción del embarazo y el profesional sanitario que la asista en el procedimiento. Sin embargo, no por ello los abortos desaparecen.

Según información del Centro de Derechos de la Mujer, a pesar de la prohibición total del aborto, cada año se registrarían más de 50,000 abortos en Honduras, cifra que representa el 5% de las causas de muerte en mujeres. Además, de acuerdo con información de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en 2016 se reportaron 900 partos de niñas entre 10 y 14 años, y 24,000 partos de adolescentes de entre 15 y 19 años, la gran mayoría resultado de violencia sexual y de la falta de acceso a métodos de planificación familiar.

Honduras se ubica como el segundo país con la tasa de embarazo adolescente más alta en América Latina, con una tasa de fecundidad de las adolescentes de 101 nacimientos por cada 1,000 mujeres de 15 a 19 años.

De tal forma, los marcos legislativos que penalizan totalmente el aborto ponen en riesgo la salud y vida de las niñas, adolescentes y mujeres, por lo que han sido reconocidos por diversos organismos internacionales como políticas que violan sus derechos humanos y las obligan a continuar con embarazos forzados y a recurrir a servicios clandestinos.

Es un hecho que en los países donde el aborto es ilegal las mujeres sufren graves consecuencias de salud, incluso la muerte, ya que se ven obligadas a recurrir a procedimientos riesgosos que ponen en peligro su vida cuando un aborto realizado en condiciones adecuadas sería seguro. En cambio, los países donde es legal el aborto disminuyeron el riesgo de muerte por complicaciones en procedimientos inseguros, además, los Estados con leyes menos restrictivas sobre el aborto tienen en general menores tasas de abortos que los países que son más punitivos o restrictivos.

Autor: Ipas CAM